Fotografía inmobiliaria para captar clientes

Vivimos en un mundo digital rodeado de imágenes. Por ello, necesitamos una fotografía inmobiliaria con la fuerza suficiente para retener su interés.

¿Cómo se logra captar el interés?

En primer lugar, tengo que decir que España es de los países de la UE que menos se preocupa por la fotografía en el sector inmobiliario y las inmobiliarias que apuestan por esta técnica de marketing realmente marcan la diferencia. Esto puede deberse a numerosos factores, pero es de destacar que la imagen es uno de ellos. Pongamos un ejemplo, no es lo mismo ir con chándal a una boda que con un esmoquin entallado, de las dos maneras puedes ir sin ninguna duda, no obstante, con la segunda opción estoy seguro que encajaras más en el contexto así como tendrás más opciones de no dar la nota delante de familiares y amigos.

 

Poniendo un poco de interés en la fotografía vamos a ver como nuestro propio valor de marca  aumentara considerablemente. Es un salto importante a nivel visual, de atracción de clientes así como de imagen de nuestra propia marca. Y créanme, tanto si realizan ustedes mismos las fotografías con una previa formación como si contratan a un fotógrafo profesional los resultados les ayudarán a destacar sobre la fuerte competencia.

Aquí les dejo una serie de consejos para que las fotografías inmobiliarias no desmerezcan el piso que tanto nos ha costado captar:

PREPARACIÓN

• Limpieza, es un acto redundante cuando nos duchamos parecemos más jóvenes altos y guapos. Lo mismo ocurre con las viviendas.
• Despersonalizar, es decir, retirar los objetos personales (recuerdos, fotografías de familiares, objetos religiosos, etc) que no interesan al posible comprador ya que este debe imaginar sus propias pertenencias en ella.
• Menos es más, cuantas menos cosas tengas encima de mesas, cocina y demás estancias mejor quedarán las fotografías. Fijate a en las fotografías de decoración, no verás en bote de lavavajillas en la encimera.
• ¡Cuanta más luz mejor! Abre persianas y enciende todas las luces disponibles en la estancia.

REPORTAJE

• Tenemos que hacernos con una cámara réflex y con un objetivo gran angular o en su defecto una cámara o un móvil con el que podamos trabajar en modo manual, es decir, eligiendo nosotros mismos los parámetros del disparo. Es imprescindible un trípode.
• Dar una vuelta por la vivienda para visualizar qué puntos fuertes tiene la casa y probar a cámara suelta los mejores ángulos.
• Sobre el encuadre y la composición de la toma es algo muy subjetivo y a cada persona le puede puede gustar más o menos unas cosas u otras. De este punto hablaremos largo y tendido en otra publicación.
• Como he mencionado anteriormente necesitamos una cámara que nos permite realizar fotografías de manera manual. La razón es principalmente no abusar del ISO, también llamado ruido eléctrico generado habitualmente por escenas poco iluminadas. ¿Y cómo realizar el disparo? Existen numerosos escenarios a los que podemos hacer frente. Mi recomendación en este punto es utilizar un diafragma (f) elevado para conseguir enfocar la estancia completamente, y una velocidad de obturación (disparo) tan lenta como sea necesario. Por esto último, es tan importante la ayuda de un trípode lo más pesado posible para que no existan trepidaciones en la toma.
• Edición: Una vez cubiertas todas las estancias solo nos queda recoger y procesar las imágenes con algún programa de edición. Existen muchas posibilidades gratuitas en internet tanto a nivel usuario como más profesionales, incluso con la cámara suelen haber software de edición de la casa y algunas opciones de pago que ofrecen unos resultados muy profesionales.

Espero que os haya sido de interés este artículo, en los siguientes iremos profundizando en cada uno de los diferentes apartados y reflexionando sobre técnicas de marketing que puedan ser interesantes a la hora de captar clientes a través de la imagen.

Cualquier duda o aportación es siempre bien recibida. ¡Un saludo!

«La manera más sencilla para atraer clientes es a través de la imagen»